ENOTPO: RECORRIDO POR TERRITORIOS INDÍGENAS EN FORMOSA Y SALTA (primera parte)
Entre los días 18 y 24 de septiembre se realizó un recorrido territorial a través de las provincias de Formosa y Salta, pasando por territorios de los pueblos Pilagá, Wichi, Weenhayek, Chorote, Guaraní, Diaguita, Tastil, Atacama y Lules, cuyas organizaciones forman parte del Encuentro Nacional de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios, con el objetivo de tener un estado de situación territorial real, con un análisis de los avances y retrocesos del proceso político propio para avanzar en el fortalecimiento jurídico de los pueblos y sus comunidades, acercando las herramientas necesarias.
Reunión con la Federación del Pueblo Pilagá, en la comunidad “Pencole 29 de Abril”, Las Lomitas, Formosa.
El día 18 se llevó a cabo la reunión con la Federación Pilagá, en las comunidades “Pencole 29 de abril” y “Oñidy”, a pocos kilómetros de Las Lomitas, provincia de Formosa. Allí fueron recibidos por el Saturnino Miranda y Raquel Arce, autoridades del Pueblo Pilagá, y Juana Segundo y Juan Duarte autoridades de la comunidad, junto con otros hermanos y hermanas. Además estaban presentes las siguientes organizaciones: Educadores Originarios Nam Qom, CPI Virgilio Méndez, Consejo del Pueblo Nación Charrua, Confederación Mapuce de Neuquén, Unión de Pueblos de la Nación Diaguita de Salta, Pueblo Tolombon del Valle de Choromoros (Tucumán), Red del Pueblo Atacama, Comunidad Qom Mig Tagan (Buenos Aires) y OCASTAFE.
En la Mantanza del año ‘47 el Pueblo Pilagá fue atacado y desalojado por las fuerzas de Gendarmería, quienes ocuparon sus tierras, relegando a sus comunidades a un espacio reducido, sin agua y alejado de su territorio ancestral. Más de 700 hermanos y hermanas están desaparecidos. Muchos perdieron a sus niños durante la represalia, muchos fallecieron por falta de atención, muchos fueron asesinados: “Fue un verdadero genocidio”. En este territorio nacieron y bajo este suelo se encuentran sus antepasados.
En el año 2010 el Pueblo Pilagá decide regresar a territorio ancestral, haciendo ejercicio del derecho que los ampara como Pueblos Preexistentes: “Volvemos al lugar donde nacimos”. Sin embargo, el conflicto con la gendarmería continúa y las comunidades del Pueblo Pilagá se ven constantemente amedrentadas, amenazados e impedidos de desarrollarse libremente en su territorio ancestral. Por las luchas territoriales los Pilagás son perseguidos permanentemente, y los hermanos denuncian el asesinato de un joven hermano por haber sido parte de un reclamo social. De hecho, algunos hermanos fueron presionados para que no participen de la Asamblea.
La Federación Pilagá representa un paradigma de lucha y un antecedente para todos los Pueblos Originarios en Argentina en cuanto que es la primera organización que logró el reconocimiento por parte del Estado Nacional como tal, es decir, en tanto institución política legítima y representativa de su Pueblo.
Sin embargo, el Pueblo Pilagá requiere que el Gobierno Provincial revea la normativa referente al registro de los Pueblos Originarios y sus comunidades como una simple “asociación”, y la actualice de acuerdo al Derecho Indígena establecido en la Constitución Nacional, que reconoce a los Pueblos Originarios como Sujetos de derecho, con su propia institucionalidad social y política. En este sentido, se demanda el registro de la Personería Jurídica de las comunidades “Pencole 29 de abril” y “Oñidy” en el Registro Nacional de Comunidades Indígenas (RENACI), en tanto que son originarias y parte constitutiva del Pueblo Pilagá.
Por otro lado, se planteó la imperiosa necesidad de iniciar un proceso de consulta en relación a la instalación del Gasoducto del Nordeste que va a pasar por las provincias de Santa Fe, Salta y Formosa, en donde atravesará parte del territorio Pilagá. Es de suma importancia que dicho proceso se realice de forma previa al inicio de la segunda etapa de construcción y mediante los procedimientos adecuados, con el objeto de garantizar el derecho indígena y tomar en cuenta su opinión., intereses y conocimientos, para evitar que se menoscabe su identidad y territorio.
Se recordó el reciente fallo dictado por la Procuradora General de la Nación Gils Garbó, respecto al conflicto entre el Pueblo Mapuche y el Municipio de Villa Pehuenia, en el cual dictaminó que para que surja el deber de consulta, “la norma exige sólo la posibilidad –no la certeza– de que sean alterados los derechos, intereses o la forma de vida de las comunidades indígenas”. Es por ello que un proceso de consulta lo que hace es evitar el conflicto y buscar una solución en términos de respeto y de diálogo intercultural entre el Estado y los Pueblos Originarios.
En dicho marco, se realizó la presentación y entrega del Protocolo de Consulta Previa Libre e Informada elaborado por el ENOTPO, haciendo un repaso del derecho a la Consulta y Participación que ampara a los Pueblos Originarios y del procedimiento adecuado que los Estados deben adoptar ante cualquier acción que sea susceptible de afectar su vida o territorio.
También se presentaron los distintos ámbitos de gestión de los Pueblos Originarios en el Estado –Dirección de Pueblos Originarios y Recursos Naturales en la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Dirección de Afirmación del Derecho Indígena en el INAI, y Dirección del Buen Vivir de los Pueblos Originarios en el Ministerio de Agricultura- para el conocimiento e información de los presentes.
De acuerdo a lo informado por las autoridades Pilagá, al otro día del encuentro se presentó la policía de inteligencia en el mismo lugar donde se llevó a cabo la reunión pidiendo explicaciones. Ante este hecho los hermanos respondieron que el deber de las fuerzas policiales es cuidar a la gente y que lo que el Pueblo Pilagá está demandando es el registro de la Personería Jurídica de sus comunidades, de acuerdo al derecho que los ampara.
Reunión con la Agrupación de Comunidades Wichi de la ruta 81, 53 y 34, en la comunidad “Árbol Solo” del Pueblo Wichi, Hickman, Salta.
El viernes 19 se partió de la provincia de Formosa hacia Salta. Sobre la ruta 81, en Hickman, se encuentra la Comunidad “Árbol Solo” del Pueblo Wichi. Allí se realizó una reunión con los miembros de la comunidad, con la presencia del cacique Fidencio Flores. También se encontraba presente Valerio Cobos, cacique de la comunidad Wichi “Honat Leles”, y referente Wichi en la misma región.
Fidencio Flores expuso un conflicto que tiene la comunidad con un hombre, un tal Alberto Caro, que se presenta como supuesto “dueño” de la tierra pero que carece de papeles, y cuyo interés es lotear y desmontar un sector del territorio, y ha intentado apurar a la comunidad prometiéndoles hacer un camino que ellos necesitan para acceder al río, en donde realizan diversas actividades como la pesca, recolección de miel, leña, medicina y madera, entre otras. Al respecto, la comunidad realizó un acta estableciendo que se realizará un camino, pero que el mismo va a ser para los usos que la comunidad, y sus 30 familias, consideren pertinentes y necesarios de acuerdo a sus actividades, desconociendo al Sr. Caro en sus intenciones.
En este sentido, se remarcó la importancia de que cuando se realice el relevamiento que aún está pendiente (Ley 26.160) se debe contemplar el territorio de uso actual y público, es decir todo el espacio territorial que la comunidad utiliza para su desarrollo social y cultural.
Por otro lado, en una situación similar a la del Pueblo Pilagá, el Gasoducto del Nordeste también pasará por territorio comunitario del Pueblo Wichi. El cacique expresó su preocupación ya que personal de la empresa Techint SA, se presentó con promesas ante un hombre que es criollo, Victor Cuellar, que a partir de ese momento ha presionado a los hermanos de las comunidades de “La Golondrina” y “Árbol Solo” para firmar un acta que autorice el paso del gasoducto, bajo la amenaza de que si no lo hacen no van a tener trabajo.
Ante dicha situación, los miembros de la comunidad respondieron que el proceso adecuado es hablar con las autoridades correspondientes, respetando la decisión del Pueblo en Asamblea, sin ejercer ningún tipo de presión ni engaño. Sin embargo permanece la preocupación por la falta de consulta, la falta de información precisa acerca del proyecto y las consecuencias que el mismo pueda llegar a tener para el Pueblo Wichi.