NUEVO DERRAME DE AGUA CIANURADA EN SAN JUAN
El juez federal espera informes que podrían determinar el fin de la actividad en Veladero, operada por la canadiense, ante nuevo incidente ambiental.
Resolución. Sebastián Casanello investiga violación a ley de glaciares.
Tras el último derrame de la minera Barrick Gold en San Juan, donde tanto la empresa como el Estado provincial quedaron en la mira por la falta de controles, la Justicia considera el cierre del emprendimiento "de modo definitivo", como expresó el juez federal Sebastián Casanello.
Si bien el año pasado la Corte Suprema derivó al juzgado sanjuanino de Jáchal la investigación de Casanello sobre la responsabilidad de autoridades nacionales y provinciales en los anteriores incidentes en mina Veladero (el de la semana pasada fue el tercero declarado por la minera canadiense en un año y medio), el juez tiene a su cargo la causa sobre la posible violación de Barrick Gold a la ley de glaciares, ya que es competencia federal.
En una resolución, Casanello exigió documentación sobre el resultado de una inspección ocular en el lugar, que podría ser clave en la decisión del cierre, en medio de un escándalo con perdigones que llegaron al gobernador de San Juan, el peronista Sergio Uñac, quien a destiempo endureció la posición contra la empresa. "Es evidente que los resultados de esa inspección no sólo son de interés para este proceso penal, sino también son un material clave para que el poder administrativo revea la habilitación del emprendimiento", indicó Casanello. "Es claro que este tipo de actividad -prohibida según la Ley 26.639 en los ambientes glaciares y periglaciares- precisa para ser autorizada un estudio de impacto ambiental que demuestre la inexistencia de riesgos", agregó. Para el juez federal, las medidas de prevención "fracasaron" y los pronósticos "fueron equivocados" por los múltiples eventos contaminantes donde se vertió agua cianurada en ríos sanjuaninos.
En 2016, Casanello había ordenado la inspección sobre la mina para saber si hay contaminación, la cual fue realizada por policías federales, expertos de Medio Ambiente y el geólogo Robert Morán (quien poco antes de la polémica decisión de la Corte Suprema de correr al juez federal del caso había elevado un informe que dejaba expuesta a Barrick Gold y advertía sobre futuros derrames). Casanello aún no pudo acceder a los resultados y volvió a reclamarlos a su colega de Jáchal para que los remita "con urgencia".
A su vez, el juez hizo saber a los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, de Energía y Minería Nacional y de San Juan, y al gobernador Uñac, que ese informe es clave para tomar una determinación.
Por otra parte, el ministro de Ambiente, Sergio Bergman, presentó el viernes una demanda para que se suspendan las actividades de Veladero hasta que haya garantías de que es una operación segura. Un día antes, la minera anunció en Canadá un acuerdo de "cooperación estratégica" con Shandong Gold Group, de China, para venderle el 50% de Veladero por u$s960 millones.
Sólo en incidentes declarados (habría más que pasaron por alto, según exempleados de Barrick), al derrame de hace dos semanas habría que sumar uno de septiembre de 2016, y otro del mismo mes de 2015. Este último fue el mayor accidente ambiental minero de la historia del país, cuando millones de litros de una solución con cianuro y otros metales pesados cayeron al río Potrerillos y contaminó otros cuatro cursos de agua.